Recomendaciones para cuidar el jardín en primavera

La primavera nos invita a reencontrarnos con nuestro jardín, disfrutarlo y revalorizarlo con un mantenimiento cotidiano.

En este sentido, conviene que nos hagamos un cronograma de trabajo para que el tiempo nos rinda tanto en el jardín como en la huerta. Un posible plan sugerido para el jardín comprende las siguientes tareas:

MALEZAS: remover las malas hierbas del jardín, incluyendo el desyuye de canteros florales y de los lugares más expuestos, como el frente de la casa. Arrancarlas manualmente y de raíz, y prevenir que se formen nuevamente manteniendo en perfectas condiciones el césped del jardín y controlando periódicamente que no se vuelvan a formar en los canteros. Con el suministro de nutrientes, riegos y un corte regular, se puede impedir, en muchos casos, la aparición de malas hierbas.
ABONADO: es importante que las plantas se recuperen del invierno y por ende tendremos que abonar las plantas una vez por mes, tanto las verdes como las que tienen flor. Si es posible utilizar abono orgánico (cómpost, humus de lombriz, etc.). En el caso de los fertilizantes, convienen que sean ricos en nitrógeno (N) y se pueden utilizar tanto para jardín como patios y terrazas (plantas en maceta). Colocar remedios para las babosas.
PODA: para comienzos de la primavera se suele realizar una poda reparadora de los arbustos. Desinfectar previamente las herramientas y luego cortar las ramas quebradas o el follaje seco. Algunos de los arbustos que se suelen podar son plantas leñosas de hoja caduca y crecimiento lento, arbustos caducos de crecimiento rápido que forman estructura en la base y florecen en madera de un año o más como así también aquellos que florecen tardíamente en madera de ese mismo año. Otro tipo de poda es el de arbustos de cerco de crecimiento rápido, que se hace para que mantengan la forma y no se vean desprolijos, siempre lejos del momento de heladas.
ROSALES: aquellos rosales que terminaron enfermos en la estación anterior necesitan de un fungicida rico en azufre. Una recomendación adicional es agregar ceniza de hogar alrededor del rosal, que es un excelente abono casero y agrega PH al suelo (conviene guardar la ceniza restante para el momento en que aparecen pulgones). Combatir las plagas, especialmente pulgones y babosas. Recordar que a los rosales les gustan las áreas con sol, el suelo rico en materia orgánica, más bien arcilloso y con un pH tirando a ácido. Las plantas no deben competir con otras de mayor tamaño ni pueden plantarse bajo árboles o rodeadas de paredes.
CÉSPED: resembrar césped en las partes ralas, si aún no se ha hecho. Mantenerlo cortado bajo, verificar que no haya compactación o musgo, regar día por medio (en primavera, a diferencia del verano que requiere un riego diario) y abonar.

Estos son sólo algunos de los consejos básicos recomendados para comienzos de esta primavera. En próximas novedades nos ocuparemos de la Huerta.

Recordá que en nuestro Vivero estamos para ayudarte y asesorarte sin cargo para tu jardín, en cualquier parte del país.